En todo hogar que se precie de tal, ya sean solteros, juntados, casados, con hijos, sin hijos, siempre, por una cosa o por otra, un rápido almuerzo o una opípara cena, en la mayoría de los casos, vienen acompañados de nuestras "queridas" sobras, o como les decimos por acá, "requechos". Y así inventamos un sinnúmero de estrategias, tuppers, papel film, platos, etc. para ir conservándolas en la heladera "hasta nuevo aviso".
Quizás sea porque, de pequeños, nuestras madres han intentado hasta el hartazgo que comiéramos aquella comida que ahí se acumulaba día tras día perdiendo su sabor y frescura, y que de pronto hacía su aparición algún Domingo por la noche cuando nadie tenía ganas de cocinar, que en casa tenemos un lema: "Los requechos no tienen que ser HORRIBLES". De esta forma, es mucho más fácil comerlos. No les parece?
Y así, bajo este lema, nació este plato, "Requechos Fusión", hijo de una porción de carne de vaca y de otra porción de carne de pollo (pechuga de preferencia) que quedaron de un asado de rotisería del sábado anterior. Se imaginarán que, en medio de tantas irregularidades, las cantidades para resolver este plato son aproximadas y dependerán del gusto del cocinero y del comenzal. La clave, como siempre, es que ese tupper horrible termine siendo el mejor de los manjares!
Lo que lleva:
- Sobras de Carne de Vaca, pollo, cerdo o cualquier otra carne que ande dando vueltas por la heladera o el freezer (la cantidad queda definida según el hambre que hayan tenido en la oportunidad que guardaron las sobras)
- Cebollas salteadas, cantidad necesaria
- Salsa de Tomate, cantidad necesaria
- Sal, Ajo en polvo, pimienta, pimentón, cebolla en polvo, cantidad necesaria
- Aceite de Oliva, cantidad necesaria
- Azúcar, para cortar la acidéz de la salsa
- Caldo de Carne, cantidad necesaria
Antes que nada, acondicionar la carne que les haya sobrado, descongelándola, retirando la grasa, etc. Reservar. Saltear en una cacerola las cebollas en el aceite, y agregar luego los restos de carne. Cocinar rápidamente. Agregar la salsa de tomate, y condimentar con sal, ajo en polvo, pimienta, pimentón, cebolla en polvo, y el caldo de carne. Desde ya que cualquier otra especia que les guste será bienvenida. Corregir la acidéz con una pizca de azúcar.
Cocinar, primero con la tapa puesta y luego destapado hasta que la salsa se reduzca.
Dejar enfriar.
Esta mezcla la pueden utilizar como relleno de unas riquísimas tortillas de harina, estilo mexicano, tal como pueden ver en la foto adjunta.
Bon Appetit !!!
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